Marc Connors & Nasarre McEnroe 6 6 7
Carles Borj & Sampras Rivas 3 2 5
Esta tarde se ha demostrado, una vez más, y van unas cuantas, que ni con el juego de trileros de "Frutería López y Rivas, en lugar de pelotas, utilizamos sandías", es posible derrotar a Marc Connors y Nasarre McEnroe.
El primer set estuvo igualado hasta el empate a 3 juegos, donde una rotura, y no de ligamentos, hizo estragos en la moral de Carles Borj y Sampras Rivas. 6 a 3.
Éstos, acusaron en exceso la pérdida del primer set y, en el segundo, cuando se dieron cuenta, ya perdían por un espectacular 0 a 4.
Pero aquí empezó lo nunca visto hasta ahora en un campeonato del prestigio internacional del CIPCH: Carles Borj, se sacó de la chistera una petición totalmente fuera de reglamento, al solicitar al juez de silla el cambio de pelotas del partido.
De forma insólita e impugnable bajo todos los efectos, el juez accedió a su petición.
Pero ahí no queda todo. Lo que hasta el momento era un partido profesional con pelotas de pádel reglamentarias, se convirtió en un partido de palas en la playa, unas veces con naranjas, otras con limones. Naranjas, porque su forma redondeada era a lo que más se parecían esas pelotas. Y limones por el color del ácido cítrico.
Lamentable. La Muy Ilustre Federación ya ha tomado cartas en el asunto y en un rápido comunicado ha advertido a todos los competidores y jueces de silla que en ningún caso va a permitir se vuelva a repetir lo sucedido.
El juego con las pelotas de "Frutería López y Rivas, usted juega con melones o sandías" provocó una tímida remontada hasta el 4 a 2. Hasta ahí. 6 a 2. Juego, set y partido.
Tampoco en el tercer set, jugado con las naranjas y limones, los "tramposos" consiguieron doblegar a sus rivales. 7 a 5.
¿Lo mejor? La bebida isotónica de cebada posterior al partido que Sampras Rivas no pudo saborear al tener que cumplir con una dura jornada formativa familiar...
Butanito García
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